Es la eterna batalla de los opuestos. Y justamente donde entra el trabajo de la gente que no se ve atrás de una obra creativa.
Y es que en esa pelea se encuentra el genio detrás de loco. En el que el trabajo creativo de una persona pueda ser útil para los demás. En el que hacer un anuncio publicitario llegue a su mercado meta, que el volante que recibe una persona entregue el mensaje para el que fue creado y no todo quede en el clásico "Vi un anuncio padrísimo en la tele pero no me acuerdo de quien es".
¿Que hubieran sido los Beatles sin George Martin o el Dark Side of The Moon sin Alan Parson?
Aquí es cuando el productor, por muy buena que sea la idea, siempre debe de darle pies que estén en la tierra (o por lo menos uno).
No hay comentarios:
Publicar un comentario