Hace un año, Felix Baumgartner rompió el record del salto más alto de la historia de la humanidad. Ver la circunferencia de la tierra cuando estaba a punto de saltar en un traje de astronauta hizo que el mundo entero nos estuviéramos mordiendo las uñas.
Y ahora vemos el video una vez más y si bien sigue generando cierta admiración, no logra recrear los sentimientos de la primera vez.
Si tomas algo extraordinario y lo repites muchas veces, va perdiendo su capacidad de asombro.
Como dice Seth Godin, lo escaso es lo valioso, como el buen trabajo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario