Esta conversación tuvo lugar con Luis Afredo López Cañas y Vanesa Millán.
Kellogg tiene su principal planta en Querétaro, lugar donde gran parte de la producción es generada y se toman varias decisiones sobre la marca en nuestro país.
Sin embargo, no hay una identificación por parte del Queretano con la empresa.
Originalmente, cuando se construyó la planta, Kellogg era el lugar de élite, donde laboraba lo mejor de lo mejor. Hoy en día, este concepto ha cambiado (por la llegada de otras grandes empresas como Santander, New Holland o Bombardier) y aun cuando Kellogg es un gran lugar para laborar, no hay un arraigo por parte de la gente a ésta empresa que fue de las primeras establecerse.
Y al parecer ha sido cuestión de decisión puesto a que fuera de la carrera que organiza una vez al año, Kellogg no ofrece nada especial para la gente de su comunidad.
¿Cual debería ser la misión local?
En Querétaro, todas las casas deben de tener exclusivamente productos Kellogg.
El producto debería ser más barato que en cualquier parte del país porque no hay que pagar transporte a ningún lado; las calles se deberían de llamar Blvd. Corn Pops, y Prol. Zucaritas; existir una zona en el Querétaro 2000 o el Parque Bicentenario (los dos parques más grandes del municipio) exclusiva para que hubiera contacto de los consumidores con las diferentes sub marcas de la compañía.
Ojalá Kellogg se arraigue en ésta ciudad que está creciendo de manera exponencial y en la cual el campo de oportunidad es enorme.
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